martes, 22 de noviembre de 2011

ELOGIO DE LA MESURA (43)


MESIS EN ESMIRNA


Esmirna actualmente es una ciudad portuaria turca en las costas del Mar Egeo y en los tiempos clásicos era colonia jónica muy cerca de Éfeso y Mileto. Allí existía un templo a una doble Némesis, similar a la que aparece en este grupo escultórico. Los entendidos no logran llegar a un acuerdo sobre el significado de esta doble Némesis, ni tampoco si este santuario es anterior o posterior al de Ramnunte.

La noticia histórica sobre esta doble Némesis aparece en Pausanias: "Alejandro hijo de Filipo fundó la actual ciudad de Esmirna por la visión que en sueños tuvo: cazando en el monte Pago, llegó según venía de la caza al santuario de las Némesis y halló una fuente delante del santuario y un plátano nacido encima de la fuente. Y cuentan que cuando se durmió debajo del plátano, las Némesis se le aparecieron y que le ordenaron construir allí una ciudad y trasladar a ella a los esmirneses desde la antigua. Y los esmirneses enviaron diputados a Claro a consultar sobre esto y el dios les respondió lo siguiente: Tres o cuatro veces bienaventurados serán aquellos hombres que habiten Pago allende el sagrado Meles. Con esto creen que hay dos Némesis en vez de una y que su madre es Nix, aunque los atenienses dicen que la diosa de Ramnunte es hija de Océano"

La escultura de arriba se encontró en Costanza (Rumanía) junto al Mar Negro, ciudad donde estuvo desterrado Ovidio.

sábado, 19 de noviembre de 2011

ELOGIO DE LA MESURA (42)

Homenaje a Luis Batanaz Palomares

La Facultad de Ciencias de la Educación, en colaboración con el departamento de Educación, ha llevado a cabo un acto de homenaje al profesor Luis Batanaz Palomares, fallecido el día 8 de mayo del presente año. Intervinieron en el mismo Trinidad Martínez García (Inspectora General de la Consejería de Educación), Alfredo Jiménez Eguizábal ( Catedrático de Universidad del Área de Teoría e Historia de la Educación de la universidad de Burgos), Manuel Ventura Limosner (Exinspector, quien participó en nombre de la familia) y, representando a los entes organizadores, Francisco Villamandos (decano de la Facultad) y José Luis Alvárez (director del Departamento de Educación )

Al acto, que tuvo un importante componente académico - además del emotivo recuerdo personal- asistieron los familiares más cercanos ( su esposa, su hija, su hermano, su yerno y sus sobrinos), junto con numeroso público que llenó la Sala de Grados de la Facultad. En el programa del evento se incluyó la presentación del libro del homenajeado, recientemente editado por el Servicio de Publicaciones de la UCO, "La Inspección de Primera Enseñanza durante la Guerra Civil y el Primer Franquismo (1936-1943). Represalia y desgarramiento", considerado como una importante contribución a la historiografía pedagógica de recuperación de la memoria.




martes, 15 de noviembre de 2011

ELOGIO DE LA MESURA (41)



NÉMESIS EN ITÁLICA


Anfiteatro




En el Anfiteatro de la ciudad de Itálica (Santiponce, Sevilla) existían espacios donde se desarrollaron cultos a dioses durante época romana imperial, entre los siglos II d.C. y IV d.C. Según estudios epigráficos estuvieron dedicados fundamentalmente a dos divinidades femeninas cuyo culto debió estar relacionado entre sí: la diosa Némesis y la diosa norteafricana Caelestis.

Se ha de destacar la singularidad de los cultos en Itálica como es la asimilación de Némesis a Caelestis y la existencia de un característico tipo de exvotos en forma de placas con huellas de pies (uestigia). Estas singularidades no se constatan nunca fuera de los antiguos territorios de Hispania. En Mérida se localizó un "sacrarium" con una inscripción dedicada a la "Dea Invicta Caelestis Nemesis"

Este conjunto de placas con" vestigia" o "plantae pedum" --verdaderamente excepcional dentro de los exvotos a Némesis-- lo constituye algo más de una docena de placas marmóreas para ser empotradas en el suelo.

El principal espacio de culto, el "templum de Caelestis--Nemesis" tenía un rico pavimento de mármoles de Italia y pequeños trozos de estuco rojo en sus muros. En el suelo a sus pies se ven dos lápidas votivas de peregrinos, con el nombre de los donantes grabados. (Así lo explicaba su descubridor Parladé).

Se conocen una con un epígrafe en griego dedicada a Nemesis Augusta; otra dedicada a Nemesis Praesens por el devoto Aurelius Polyticus y una tercera dedicada por P. Caesius Romulus.

L a especial relación de Némesis con el Anfiteatro se explica por su asimilación a Diana, protectora de la caza y de los animales y con Fortuna que concedía la justa victoria a los gladiadores.

En resumen: el sincretismo entre los cultos de Caelestis y Nemesis , como refuerza la inscripción de Mérida dedicada a Dea Invicta Caelestis Nemesis. La singularidad del culto a Caelestis en el anfiteatro por ese sincretismo con Nemesis y , por último, los exvotos de plantas de pies que no aparecen vinculados a los cultos de ambas divinidades.
En el anfiteatro de Tarraco también existía un "Nemeseum" con una imagen de la diosa pintada sobre estuco. Ahora se encuentra en el Museo de Tarragona.

( José Beltrán Fortes "El Anfiteatro de Itálica. Análisis arqueológico de los espacios y cultos documentados en el edificio en época imperial")

lunes, 14 de noviembre de 2011

ELOGIO DE LA MESURA (40)


Bill Napier nació en Perth ( Escocia) en 1940. Estudió Astronomía en la Universidad de Glasgow y ha trabajado en observatorios de Escocia, Italia e Irlanda. Es profesor honorario en el Centro de Astrobiología de Cardiff y tiene un asteroide con su nombre (7096 Napier).

Un informe estremecedor de la CIA confirma que cosmonautas de la Federación Rusa han desviado un asteroide para hacerlo colisionar con los Estados Unidos. Un equipo de los mejores astrónomos del mundo tienen cinco días para identificarlo --bautizado con el nombre de Némesis--y detenerlo antes de que concluya su devastador viaje. Si no aciertan, el Presidente no tendrá otra opción que contestar con un masivo ataque nuclear.

Pero mientras el tiempo se acaba y la búsqueda de Némesis parece desesperadamente imposible (buscar una aguja en un pajar), el experto británico en asteroides --protagonista de la novela--Oliver Webb-- descubre que la trayectoria de Némesis fue profetizada en un manuscrito del siglo XVII, cuya única copia se ha perdido misteriosamente...

En la novela se entrecruzan tres tramas: el trabajo del equipo de astrónomos; la vida , juicio y condena del fraile Vincenzo Vincenzi por la Inquisición, acusado de sostener las teoría de Galileo y Copérnico y autor de "Phenomenis Novae" y una conspiración de los halcones cercanos a la Casa Blanca para destituir al presidente, al que consideran demasiado "pacifista" para enfrentarse al reto ruso.

La única referencia temporal de la novela es que el Presidente recibe y agasaja a los Reyes del Reino Unido, Carlos y Camila Parker-Bowles.

El libro se publicó por primera vez en 1998 y ha tenido dos ediciones más, en 1999 y en 2006. Creemos que no está traducido al español y tiene un sorprendente final. Son innumerables las veces que se nombra a Némesis, aunque la califican como la diosa de la Destrucción y en otra ocasión como diosa de la Ira justiciera. Se lee con interés y casi apasionadamente.

domingo, 6 de noviembre de 2011

ELOGIO DE LA MESURA (39)






Escuela de Maastricht


(Contra el fanatismo)


Mi familia, que vivía por entonces en una ciudad de unos setenta mil habitantes, era la única que hablaba una lengua que mis padres llamaban "maonés" y en ella yo era el "petit". Mi amigo Valentín vivía dos calles más arriba y su padre era sastre. Si alborotábamos demasiado en su casa su madre, enfadada, nos regañaba en otra lengua distinta. Cuando volvió de su primer viaje a Galícia comentaba asombrado: "al bajar del tren me quedé de piedra; en aquel pueblo todo el mundo hablaba como mi madre."

Al colegio asistían también treinta o cuarenta niños judíos que nos obsequiaban de vez en cuando con "galleta hebrea" y algunos musulmanes que eran hijos de "moros amigos de España" y el recuerdo más vivo y persistente del año 1945 es la imagen de los niños judíos, vestidos con traje de sábado, agrupados todos en el centro del patio de recreo, esperando la entrada a clase y como muy contentos.Había terminado la guerra.

Tuvieron que pasar años y muchas lecturas -"Mila 18", "El diario de Ana Frank", "El último justo"...- para comprender la alegría de los niños hebreos; saber que lo que hablábamos en casa era catalán y en la de Valentín, gallego y que con las galletas que nos regalaban habíamos participado, como gentiles, en la alegría de muchas pascuas judías.

Con estas experiencias fue casi natural crecer en un espíritu tolerante y en la comprensión y respeto a las diferencias individuales, estimándolas como rico patrimonio de la humanidad.
Pero, desde estas mismas convicciones, creemos necesario desmitificar los sacrosantos derechos de todas las lenguas, de todas las religiones y de todas las identidades nacionales y renegar una y mil veces de los holocaustos que promueven.

Para el viaje de distinguir y separar se precisan pocas alforjas; es bastante fácil: a poco que nos lo propongamos, terminamos todos convertidos en "robinsones crusoes", en islas de soledad. Y si ahondásemos con vehemencia en lo que nos distingue, pronto --unas pocas generaciones atrás-- llegaríamos a la tribu a la que pertenecíamos o a la caverna que habitábamos.; llegaríamos pronto a Sarajevo.

Es más dignamente humana, se necesita más inteligencia y voluntad, más escuela, la empresa común de potenciar los vínculos comunes que nos unen y enaltecen como personas. Es preferible la escuela de Maastricht a la escuela de la tribu y la caverna.
(Publicado por este corresponsal el 7 de enero de 1993 en el Semanario "Escuela Española"de Madrid)
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